EL TRIUNFO DEL GUAPO DEL FAROL – MÁS ALLÁ DE LA LÓGICA BORROSA


Por Alejandro Marchionna Faré [i]

 

Ya hemos hablado del guapo del farol. El domingo 14 de noviembre de 2021 nos deleitó con una muestra más de su personalidad desdoblada.

La coalición opositora arrasó en el país, pero quizás se confió demasiado y esperaba resultados diferentes tanto en CABA como en la provincia de Buenos Aires. Pero el Frente de Todos perdió por 8,5 puntos a nivel nacional. Ha tenido una inaudita hemorragia de votos desde su triunfante mascarada de 2019. Perdió la provincia de Buenos Aires. Perdió en Santa Cruz, donde quedó tercero. Perdió en Chubut. Perdió en La Pampa. Perdió el quorum propio en el Senado. Perdió bancas en Diputados.

El país esperaba el democrático reconocimiento de la derrota. En un eco atormentante de la negativa a transferir los atributos de la Presidencia al recién electo Ing. Macri, nunca llegó ese reconocimiento. El primer mensaje del guapo fue el de un pichoncito mojado. En un tono y con una dicción similares al saraserío de un recordado meme del que fue protagonista, echó cinco veces la culpa a la oposición por los problemas del país y los invitó a dialogar para encontrar soluciones a dichos problemas.

A este mensaje contrito aunque compadrito, siguió la algarada a la que se sumó a los pocos minutos en el bunker de Chacarita. Baile frenético y máscaras de alegría sin fin. Finalmente cerró el acto con palabras desbocadas: “El próximo miércoles que recordamos el Día de la Militancia, llenemos la Plaza de Mayo y celebremos este triunfo como corresponde”.

¿Qué? ¿Oímos bien? ¿Podrías por favor poner en flow para entender qué dijo? Tres veces la repetición, porque desafiaba la realidad. Qué lógica extraterrestre... Ni siquiera con las contorsiones lógicas que le permitirían los conjuntos borrosos es posible explicar, bueno, ni siquiera entender.

El guapo se adjudicó una victoria que no fue la de Tolosa Paz, sino el acortamiento de distancia que no alcanzó a través del uso descarado del “plan platita” y de la logística del “aparato” que sembró de remises y ómnibus las autopistas, avenidas y calles del conurbano más profundo.

Nunca tan descriptiva la frase atribuida a Joseph Goebbels[1]: “miente, miente que algo quedará”. Qué gran maestro para la lógica extraterrestre del guapo del farol.

Y qué gesto tan esencialmente antidemocrático el seguir pretendiendo que el 33% no fue una derrota. Autoritario. El líder del Frente de Todos, antes un intelectual progresista y funcionario tecnocrático, además niega absolutamente la realidad: perdió millones de votos respecto de la elección de 2019…

Mientras tanto los ciudadanos de a pie nos hacemos un mar de preguntas. ¿Qué dirá la señora de la situación? ¿Dirá algo directamente relacionado? ¿O le llegará la temporada de la brama? ¿Se romperá el FDT? ¿Habrá cambios en el Gabinete?

Pero estos chusmeríos dignos de HOLA! esconden las preguntas de fondo que todos nos hacemos. ¿Se ajustará el gasto público? ¿Bajarán los impuestos? ¿Devaluarán? ¿Sabrán recomponer las reservas? ¿Acordarán con el FMI? ¿Cómo generarán puestos de trabajo genuinos luego de una reforma laboral? ¿Se profesionalizará la contratación de vacunas de aquí adelante?

Y bueno, el miércoles 17 de noviembre se hizo la algarada en la plaza. Sin La Cámpora, ya que su líder tuvo que armar antes su guardia pretoriana para circular por Diagonal Norte en imperial aislamiento con reminiscencias del horror de su madre por el contacto con el pueblo.

Desde un rincón ignoto del Universo, desde los límites de la galaxia se oyó un nuevo mantra delirante recitado con una cadencia más cerca de un verdadero guapo de barrio que del supuesto profesor de Teoría del Delito: “NADIE NOS HA VENCIDO, CADA VEZ TENEMOS MÁS FUERZAS”.

La verdad, es que ya no es verdad el apotegma que dice “todos unidos triunfaremos”.

 

[1] Ministro de Propaganda del III Reich

 

[i]   Presidente de Integra Negocios. Miembro de la Cátedra PwC de Gobierno de las Organizaciones del IAE Business School. Secretario de la C.D. y presidente del Comité Académico del Instituto de Gobernanza Empresarial y Pública (IGEP). Graduado de los programas DICA I, DIEPE I y CORPSEC I del IGEP, miembro por Argentina del GNDI (Global Network of Director’s Institutes). Presidente de la Fundación Andes. Fellow y Chartered Director del IoD (Gran Bretaña). Ingeniero Industrial (UCA), MBA (Harvard), Doctor en Dirección de Empresas (UCEMA), PAD (IAE).